Un sueño sobre dos ruedas

MotorLand da desde hace unos años la oportunidad a los futuros ingenieros de construir un sueño que circule sobre dos ruedas. La competición se denomina Motostudent y en ella participan universidades nacionales e internacionales, con el objetivo de que su moto sea la ganadora. El equipo de la UZ ya trabaja para alcanzar la gloria.

Zaragoza.- Disfrutar de una carrera de motociclismo, desde los adelantamientos de Marc Márquez a una leyenda como Valentino Rossi o el sonido insistente del himno de España prueba tras prueba, lleva detrás un gran trabajo. Este deporte tiene dos grandes protagonistas: por un lado el piloto y por otro su máquina, su inseparable compañera, que no es otra que la propia moto. En MotorLand Aragón no sólo quieren promocionar el espectáculo de la MotoGP, sino que van más allá y se adentran en el mundo formativo con una competición que resalta por encima de todas: Motostudent.

Se trata de una prueba bienal que vivirá su tercera edición en las instalaciones de MotorLand Aragón en el año 2014. Un desafío internacional entre equipos de escuelas universitarias de ingeniería que consiste en diseñar y construir un prototipo de moto de competición, además de la realización de un proyecto industrial. La exigente cita viene marcada por las características que ha de reunir la moto, que vienen a ser las mismas que las de la categoría Moto3 del Mundial de motociclismo, con un motor de 250 centímetros cúbicos y cuatro tiempos.

El objetivo es claro: el equipo universitario se debe meter de lleno en el papel de una empresa fabricante de motos, de cara a desarrollar y fabricar un prototipo bajo una serie de condicionantes técnicos. De hecho, son juzgadas en pruebas estáticas de seguridad y dinámicas en pista que incluyen exposiciones orales, inspecciones técnicas y demostraciones con las que poder evaluar y puntuar los proyectos desde puntos de vista teórico y práctico. Lo más espectacular viene con la carrera, pero detrás hay mucho trabajo previo.

Motostudent Unizar

El equipo que representa a la Universidad de Zaragoza en esta competición está compuesto de quince estudiantes de Ingeniería Industrial y Grado de Mecánica. De momento se encuentran dando los primeros pasos que desembocarán en la prueba que tendrá lugar en el mes de octubre de 2014. Para el diseño se empieza de cero, sin continuar con lo del año anterior, de manera que todas las universidades parten en principio en igualdad de condiciones.

¿En qué se encuentran ahora? Con el equipo recién constituido están en pleno proceso de “buscar patrocinadores, financiación y decidir qué miembros se van a especializar en cada tema”, explica uno de sus integrantes, Carlos Burriel. Tienen hasta el mes de mayo para formalizar la inscripción, que ya cuenta con un coste importante porque te entregan el motor y las amortiguaciones, lo único que aporta la organización junto a las ruedas. “Nuestra idea sería que para junio o julio de 2014 podamos tener la moto fabricada para tener un tiempo en verano de tres-cuatro meses para probarla, hacer en un circuito algún test y mejorarla”, comenta Burriel.

Los futuros ingenieros y mecánicos tienen hasta octubre de 2014 para perfeccionar su máquina
Los futuros ingenieros y mecánicos tienen hasta octubre de 2014 para perfeccionar su máquina

Hasta llegar a la propia competición hay dos fases. Por un lado deben fabricar un prototipo de moto con el que luego competirán en carrera, teniendo en cuenta que el presupuesto viene limitado por lo que consigan a través de sus patrocinadores; por el otro, realizar un proyecto industrial consistente en justificar la producción en serie de dicha moto, pudiendo venderla en el mercado con un coste de 4.500 euros. “Además de construirla tenemos que hacer un proyecto de empresa de motos”, aclaran.

Un proceso complicado

Lo primero que deben hacer los estudiantes es organizarse, teniendo en cuenta que el equipo se divide en distintas área: definición de la geometría de la moto, diseño del chasis y subchasis, modelado de las suspensiones, puesta a punto del motor, cálculo del escape o fabricación de los distintos componentes. Eso sí, aceptando que no pueden hacer modificaciones “más allá de afinar el escape y el carburador”.

Por ello, apuntan a innovar pero sin llegar a “arriesgar en exceso” porque quieren centrarse sobre todo en sus posibilidades de ganar la carrera. Lo primero será construir un subchasis en fibra de carbono, algo que hará un miembro del equipo como proyecto de final de carrera; e intentarán cambiar el carburador que viene de serie con el motor por un sistema de inyección electrónica. Eso sí, recuerdan que cualquier tipo de innovación “está muy sujeta al presupuesto y al tiempo disponible”.

En cuanto al presupuesto, desde Motostudent Unizar aseguran que tienen ya un patrocinador, el Colegio de Ingenieros de Aragón y La Rioja, que les ha aportado además apoyo institucional. También va a colaborar económicamente la Escuela de Ingeniería y Arquitectura, además de la propia Universidad de Zaragoza. “Estamos pendientes de más, pero la mayoría te dicen que la situación es complicada”, lamenta Carlos Burriel.

La competición

La primera parte de la competición tendrá lugar con las verificaciones técnicas y administrativas, en las que también se estudiará el proyecto desde el punto de vista industrial. La segunda parte será práctica con una serie de pruebas en la pista que finalizarán con una carrera en el circuito de velocidad de MotorLand. De la primera fase saldrán tres equipos ganadores, premiados por ser el mejor proyecto industrial, mejor diseño o mejor innovación, mientras que la gran prueba será el domingo en la pista con la carrera, a falta de la confirmación oficial.

Para ello hará falta un piloto que no supere los 15 años, algo que ya está cerrado por parte de Motostudent. “Hemos hablado con la Federación Aragonesa de Motociclismo, que apoya al equipo, colabora con nosotros, y nos han dicho que no nos preocupemos porque nos proporcionarán el mejor que puedan”, asevera Burriel, explicando además que el prototipo que crearán rondará los 160 kilómetros por hora.

El prototipo alcanzará los 160 kilómetros por hora
El prototipo alcanzará los 160 kilómetros por hora

Anterior edición

En el año 2013 participaron un total de 18 universidades de España e Italia, reuniendo en el trazado alcañizano a cerca de 200 universitarios en pleno mes de octubre. Una auténtica fiesta de la ingeniería y del motor que tuvo, como no podía ser de otra manera, a la emoción por bandera.

El galardón a mejor proyecto industrial fue para el equipo “2WheelPolito” de la universidad de Turín, embolsándose un total de 6.000 euros. Y los dos accésits con premio de 3.000 euros fueron para el equipo ovetense “MS2 Uniovi” como mejor diseño y el “UPM Motostudent” de la Universidad Politécnica de Madrid, como mejor innovación.

En cuanto a la carrera, la victoria fue para la moto de la Universidad de Barcelona, “Etseib Racing”, que hizo buena la pole y acabó imponiéndose por delante de la “2WheelPolito” de Turín y la “Epjusa Team” de Jaén. Respecto a la moto de la Universidad de Zaragoza, “MotostudentZGZ-Unizar”, comenzó la carrera apuntando muy alto, copando incluso la segunda posición en los primeros compases de la cita rodada, pero se acabó quedando a las puertas del podio como cuarto clasificado.

Un largo camino

Todavía queda un largo camino por delante hasta la cita en el inmejorable circuito de MotorLand Aragón. Los miembros de Motostudent realizarán una conferencia a mediados de mayo como presentación del proyecto en la sede del Colegio de Ingenieros de Aragón y La Rioja.

Lo demás es cuestión de mezclar trabajo y profesionalidad en un largo camino donde habrá momentos, seguro, para desesperarse y pensar en arrojar la toalla. Pero la ilusión podrá con todo eso, sobre todo porque este grupo de 15 jóvenes quiere ver su moto en lo más alto del podio. Desean que su sueño calque las maniobras de Jorge Lorenzo o Dani Pedrosa y siga circulando por uno de los mejores trazados del mundo.