La Delegación del Gobierno aplaude que el TSJA proteja la vida privada frente a los "escraches"

El Tribunal Superior de Justicia de Aragón ha dado la razón a la Subdelegación del Gobierno en Zaragoza que prohibió una marcha junto a la casa de la consejera Serrat. El TSJA afirma que no pueden utilizarse las concentraciones ante los domicilios como "medio de presión". Una decisión que ha sido aplaudida por Gustavo Alcalde.

Zaragoza.- El Tribunal Superior de Justicia de Aragón acaba de señalar en una sentencia que “no pueden utilizarse las concentraciones ante los domicilios como medio de presión para mover la voluntad de un representante de un Estado democrático, donde existen cauces de participación pública y política”.

Una afirmación de la Sala de lo Contencioso Administrativo del TSJA que crea jurisprudencia autonómica y que da la razón a la Subdelegación del Gobierno en Zaragoza en la prohibición de una marcha junto a la casa de la consejera del Educación, Cultura, Universidad y Deportes del Ejecutivo aragonés, Dolores Serrat.

Hecho que ha sido aplaudido por el propio delegado del Gobierno de España en Aragón, Gustavo Alcalde, quien ha recordado que “siempre ha defendido que cualquier persona, sea quien sea, tiene derecho junto a su familia a una intimidad sin que nadie la perturbe”.

Alcalde ha reconocido que “todo el mundo tiene derecho a presentar su disconformidad mediante concentraciones y manifestaciones”, pero que “ese derecho constitucional no puede prevalecer sobre otro derecho también Constitucional como es el de la vida privada”. “Para mí estos acosos son ilegítimos e ilícitos”, ha apostillado.

En el fallo judicial, los magistrados califican de “correcta” la decisión de modificar el trazado de la manifestación solicitada por FASE-CGT porque, de celebrarse, constituiría “una perturbación en su derecho a la intimidad personal y familiar”.

También afirman que hay lugares alternativos a los domicilios particulares y que “ser político no supone una renuncia a su vida privada o familiar”.