Teruel.- No es fácil preparar un programa de actos para los días más importantes de los turolenses en época de crisis, pero cuando falla el presupuesto hay que echar mano de la imaginación, la ilusión y, sobre todo, del sentimiento vaquillero. La concejal de Fiestas del Ayuntamiento de Teruel, Rocío Casino, se considera “incondicional de la Vaquilla” y, aunque esos días tiene una gran responsabilidad, es ante todo una “vaquillera, vaquillera, que no se pierde ni un solo momento de la fiesta”.
Pregunta.- ¿Cómo se han recibido las fiestas de la Vaquilla?
Respuesta.- Estaba todo preparado desde el pasado viernes, cuando comenzaron los actos institucionales y la traca. Los once días que dura la Vaquilla están organizados, aunque siempre estás pendiente de que todo salga bien. Y sí que es cierto que este pasado fin de semana fue es el más importante, lo vivo con mucha ilusión porque soy vaquillera, vaquillera. Y, por su parte, las peñas terminaron el montaje de sus locales, de sus escenarios ya que han esperado estos días con gran emoción.
P.- ¿Ha sido muy complicado hacer un programa tan completo, teniendo en cuenta la reducción del presupuesto que ha sufrido la Concejalía? ¿Cómo se consigue?
R.- Trabajando mucho. Es muy difícil hacer actividades para todos los públicos con un presupuesto muy reducido, mucho más que en años anteriores. La Concejalía ha visto este año reducidas sus partidas en un 10%, así que no es fácil. Pero hemos contado con la implicación y la suma de esfuerzos de entidades, de asociaciones e instituciones ha permitido que este año tengamos un programa mucho más completo. Son más de 80 actos. A mí me gustaría agradecer esa participación, yo sola no hubiera podido. Además, me parece una fórmula muy buena, incluso para épocas de bonanza, porque los turolenses así hacemos nuestras propias fiestas y participamos de ellas.
P.- Esta fórmula, además, permite que las actividades lleguen a todos los barrios, en especial al casco histórico, ¿no es así?
R.- Lo que pretendíamos desde la Concejalía de Fiestas era dar ese ambiente festivo al Casco Histórico que como zona más céntrica de la ciudad se merece. De esta manera, al llevar actividades a sus propios barrios, las asociaciones se implican en la elaboración del programa festivo, al fin y al cabo, las fiestas son, y siempre lo diré, de los turolenses independientemente de donde vivan. Por lo que me comentan, y así lo veo yo también, ha sido un acierto. Teruel se viste de fiesta.
P.- Aunque se ha reducido el presupuesto, no ha faltado un gran concierto. Melendi visitó Teruel para dar comienzo a las fiestas.
R.- Sí, dado el presupuesto, este año optamos por reducir los conciertos. No solo por el dinero del Ayuntamiento, sino porque imaginamos que las familias tampoco pueden hacer frente a muchas entradas. Interpeñas celebró uno, con una entrada económica, y el Ayuntamiento hizo un gran esfuerzo para ver a Melendi fuera más barato. De momento está saliendo todo muy bien, y cuando ves que la gente disfruta y se divierte, es muy gratificante.
P.- La limpieza suele ser un punto importante en las fiestas. ¿Cómo se ha organizado el servicio?
R.- Tengo que decir que el presupuesto de limpieza no se ha reducido. Limpiamos todos los días, con especial cuidado en la Puesta del Pañuelico para que los vidrios que se acumularon el pasado año no lo hicieran este y que nadie corra peligro. En una fiesta tan multitudinaria hay que prevenir y hay que ser muy cuidadosos.
P.- ¿La seguridad es otro de los elementos clave estos días?
R.- Sí, yo tengo que reconocer que uno de los momentos en que más miedo paso es con los toros de madrugada. Nos bebemos dos cañas y somos muy valientes, pero bueno, una vez que pasan los toros ya estoy más tranquila. Y además, la colaboración con los Cuerpos de Seguridad, Protección Civil, Cruz Roja y los voluntarios ha sido, una vez, más fundamental para garantizar que todo vaya bien y no haya problemas. También está prevista seguridad en las zonas de camping y de aparcamiento.
P.- El año pasado fue protagonista la sentencia que limitaba los decibelios en las barras. ¿Se espera que este año se respete también y sin polémicas?
R.- Las cosas siguen igual. Es una sentencia que hay que cumplir. La valoración de la gente, en este sentido, fue muy positiva porque el año pasado se pudieron escuchar y apreciar las charangas, y este año seguiremos la misma tónica. Esto no ha impedido que haya menos barras, solo cuatro hosteleros no la han solicitado, con respecto al año anterior.
P.- ¿Cómo vive la Vaquilla una concejal del Ayuntamiento y cuál es su momento favorito?
R.- Yo como turolense me considero muy vaquillera, muy vaquillera. Espero las fiestas con muchísima ilusión, aunque desde mi puesto de responsabilidad quizá con un poco más de preocupación. Y mis momentos… son todos, todos. Porque es una fiesta que transcurre en la calle y a mí me gusta mucho el trato con la gente.
P.- Para un turolense, ¿qué es la Vaquilla?
R.- Eso es difícil de contestar, pero yo creo que es un cúmulo de sentimientos, de emociones. Es un reencuentro con los turolenses, con los que llegan de fuera. Es diversión en la calle. La Vaquilla es un sentimiento.
