El nuevo convenio de rehabilitación urbana realizará más de 400 intervenciones en el Casco

El Ayuntamiento y la Fundación Federico Ozanam han firmado un nuevo convenio para la rehabilitación urbana y social, enmarcado en el Plan contra la Exclusión Social. Con este proyecto, dotado con más de un millón de euros y 53 personas, realizarán más de 400 intervenciones en viviendas, fachadas y locales de personas sin recursos.

Zaragoza.- Nuevo paso en la lucha contra la exclusión social de la capital aragonesa. El Ayuntamiento y la Fundación Federico Ozanam han firmado un nuevo convenio a través del que se arreglarán fachadas, locales y viviendas de personas sin recursos. El Consistorio aporta para este proyecto más de un millón de euros y participarán más de medio centenar de personas.

El proyecto se pondrá en marcha esta misma semana y su ámbito de actuación se centra en el Casco Histórico. Serán más de 400 intervenciones, frente a las 346 que se llevaron a cabo el pasado año. En esta ocasión se ha incrementado la aportación económica en más de 200.000 euros, por lo que “es posible aumentar las actuaciones y las personas que trabajan en ello”.

En este sentido, el presidente Fundación Federico Ozanam, Enrique Santamaría, ha insistido en que para la entidad este proyecto “es un reto porque se gestiona una cifra importante de recursos públicos”, lo que obliga, tal y como ha agregado, “a ser muy escrupulosos con la utilización”.

El Convenio, por tanto, se dirige a todos los habitantes del Casco Histórico, a los vecinos con escasos recursos que recurren al servicio gratuito de reparación de interiores a través del Centro Municipal de Servicios Sociales; a los vecinos que utilizan las instalaciones públicas: colegios o equipamientos sociales, que se mejoran a través del proyecto y, sobre todo, a los vecinos participantes del proceso formativo.

Los participantes reciben un salario neto de 747 euros. Santamaría ha remarcado que, de esta forma, “aprenden un oficio a la vez que participan de una relación laboral normalizada”. Además, una vez que finaliza el programa “tienen más posibilidades de incorporarse al mercado laboral porque han adquirido más experiencia”.

Este proyecto lleva funcionando 18 años, a lo largo de los que han participado más de 900 personas residentes en el Casco Histórico, derivadas por los Centros Municipales de Servicios Sociales, entre ellos: parados de larga duración mayores de 45 años; jóvenes desempleados sin ninguna cualificación; personas sin recursos económicos y perceptores del Ingreso Aragonés de Inserción.

En el programa de este año forman parte 53 personas, además de 12 profesionales, de los que ocho son oficiales. Unas cifras que suman un total 65 participantes.