Zaragoza.- La Policía Nacional ha detenido en Zaragoza a diez miembros de la banda latina “Dominican Don´t Play” como presuntos autores de varios delitos. También el pasado mes de abril se arrestó a cinco integrantes de los “Black Panther”.
Las investigaciones se iniciaron a principios de 2013, y se centraron en la mencionada banda latina, la formada por los llamados “Black Panther”, cuyo núcleo principal se encuentra en la zona de Cataluña, si bien se distribuyen por otros puntos de España en los denominados “Bloques”, que no son otra cosa que subgrupos de pertenencia al principal y que obedecen las pautas o instrucciones de comportamiento dadas por el grupo principal o de referencia.
Como todas las bandas latinas, según fuentes de la Jefatura Superior de Policía en Aragón, mantienen unos ritos o costumbres que permanecen ocultos para las personas ajenas a ellas, estando obligados por un principio de jerarquía y respeto hacia sus jefes y cuyo incumplimiento está sancionado con castigos físicos. Cada “Bloque” tiene sus propios jefes que son nombrados por los del grupo de referencia. Sus integrantes lo hacen de por vida, no pudiendo salir de las mismas. Normalmente, sus miembros pertenecen a familias desestructuradas, llegando a ser la banda su única y verdadera familia. Resulta habitual la comisión de delitos contra la propiedad (robos de teléfonos móviles), contra la salud pública, (consumo en lugares públicos de marihuana), lesiones, amenazas y coacciones, etc. Las bandas latinas marcan sus zonas con pintadas en paredes o bancos públicos especialmente de parques, prohibiendo la entrada a ellas a otros jóvenes bajo amenazas de represalias.
En el mes de abril, se detectó la presencia en Zaragoza de miembros de los “Black Panther”, quienes habían marcado con simbología propia un parque en el barrio zaragozano de San José, lugar donde se reunían.
Sin embargo fue en un parque del barrio de las Delicias donde se procedió a la detención de ocho miembros de los “Black Panther” cuando procedían a cometer un robo con violencia. Iban provistos de objetos contundentes y punzantes para intimidar o agredir a sus víctimas. La rápida intervención de la Policía Nacional evitó que hubiera que lamentar daños físicos a personas. Todos ellos pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción de Zaragoza decretando el juez su ingreso en prisión.
Paralelamente, se detectó también que existía en la ciudad otra banda latina llamada “Dominican Don´t Play” cuyos miembros venían cometiendo robos con violencia, y provocando numerosas peleas en espacios públicos. Al igual que la banda anterior, éstos también se organizan en una especie de subgrupos de pertenencia denominados “Coros”, estando en este caso su núcleo principal en Madrid.
En cuanto a los hechos delictivos cometidos por miembros de esta banda, por lo general se refieren a delitos contra la propiedad, la salud pública, seguridad y contra las personas, interviniendo cada vez más en dichos ilícitos personas menores de edad, posiblemente utilizados conscientemente por la banda dada la menor carga penal que supone su detención.
Si bien el fenómeno de bandas no ha llegado en nuestro país a suponer un grave y generalizado problema para la seguridad pública, se hace necesario mantener un continuo control de este tipo de organizaciones y de sus actividades delictivas para evitar el asentamiento, proliferación y captación de nuevos miembros.
Se intuye una elevada “cifra negra” de ilícitos no denunciados ni conocidos por parte de estas bandas, bien por tratarse de hechos de escasa relevancia o por el temor a sufrir represalias ante eventuales denuncias por parte de las víctimas.
Las investigaciones y detenciones descritas han sido llevadas a cabo por la Brigada Regional de Información, el Grupo de Menores de la Brigada Regional de Policía Judicial y la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Aragón.
En la actualidad la investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones.
