DEPORTES
Muñoz exige más
Zaragoza.- Pírrico partido del Real Zaragoza sobre el césped de La Romareda, donde ni tan siquiera adelantarse en los primeros minutos sirvió a los maños para practicar algo de fútbol. Eso sí, con trabajo y pundonor, los aragoneses rescataban tres nuevos puntos en el Estadio Municipal tras imponerse por 2-1 ante un Racing que durante varias fases fue incluso superior a los locales, aunque el gol de Jaime Romero lo valió todo.
En el once de Víctor Muñoz lo esperado, con la novedad de Tierno junto a Dorca en la medular y el regreso de Cabrera al lateral zurdo. Y lo cierto es que el choque no pudo empezar de mejor manera, con el guión soñado. Eldin volvía a poner la magia con un sobresaliente pase por encima de la zaga dejando a Borja delante de Raúl, al que batía con una soberbia vaselina en el minuto 4 de choque.
Y, a partir de ahí, apagón. Partido romo en ataque de ambas escuadras, sin prácticamente ocasiones y con los porteros sin necesidad de mancharse el uniforme. De hecho, era el Racing el que al menos trataba de mantener la posesión mientras que los de Muñoz, viendo el partido por sanción desde zona de prensa, esperaban una contra que no llegaba. Tan sólo Tierno y Eldin parecían tener alguna idea clara.
Los minutos pasaban y la sensación era que los cántabros podían empatar en cualquier momento. Lo lograban en el 36, tras un fallo clamoroso de Rubén, y ya iban varios, aprovechado por Koné para anotar con un disparo seco desde la frontal. Y nada más ocurrió hasta el descanso, apenas un intento lejano sin peligro de Willian José y la confirmación de que el propio Koné estaba volviendo loca a la defensa maña, en concreto a Rubén.
Segunda parte
La segunda mitad comenzó como la primera, con nuevo susto del nueve racinguista que mandaba el esférico lamiendo el larguero de Whalley. Eso sí, al minuto contestaba Borja con un lanzamiento que salvaba Raúl abajo con apuros. Como el Real Zaragoza no reaccionaba, Longhi movía el banquillo en el 56 dando entrada a Vallejo y Jaime Romero en detrimento de unos muy desafortunados Rubén y Álamo. El central, además, se marchaba visiblemente enfadado y con gestos poco oportunos.
No mejoraba en nada el juego ni tampoco llegaban las ocasiones, encontrándose el choque en un momento en el que la balanza no parecía decantarse de ningún lado. Eldin probaba a Raúl a balón parado, pero el meta volvía a estar seguro usando sus puños. Además, el Racing comenzaba a dar por bueno el punto, tratando de prolongar en el tiempo cada saque de banda pero sin renunciar por supuesto al peligro arriba de Koné.
La desesperación comenzaba a apoderarse de los blanquillos, que sobre todo por medio de Willian José caían constantemente en un desaconsejable individualismo. Apretó al final el conjunto maño, que terminó llevándose un grandísimo premio tras aprovechar Jaime Romero un pase interior al área para hacer el 2-1 en el último suspiro. Tres nuevos puntos y el Real Zaragoza se mete de lleno en la pelea por el ascenso.
Concentración a las puertas
Minutos antes del comienzo del partido, sobre las 17.30 horas, la afición del Real Zaragoza se concentraba en los aledaños del Estadio Municipal de La Romareda para protestar por las dificultades que la Agencia Tributaria está imponiendo al conjunto aragonés en las últimas fechas. Los seguidores, cerca de 600, estaban acompañados por música zaragocista y también por las Peñas del Racing de Santander que se han desplazado hasta la ciudad del Ebro.
