El arzobispo de Zaragoza, Manuel Ureña, renuncia al cargo por motivos de salud

El arzobispo de Zaragoza, Manuel Ureña, ha anunciado que deja el cargo por motivos de salud. Varias operaciones de corazón y de próstata en los últimos años son las razones que aduce para llevar una vida más tranquila. El Colegio de Consultores nombrará mañana a un administrador hasta que la Santa Sede elija al nuevo arzobispo.

Zaragoza.- El arzobispo de Zaragoza, Manuel Ureña, ha anunciado este miércoles que deja el cargo por motivos de salud. Varias operaciones de corazón y de próstata en los últimos años son las razones que aduce. El eclesiástico ha apuntado que le han recomendado llevar una “vida más tranquila”.

En rueda de prensa, monseñor Ureña ha explicado que el Ministerio Pastoral exige "la donación de toda la persona". Ante esta situación y para evitar “peligros” y "reveses" en un futuro ha decidido renunciar al cargo.

“Espiritualmente estoy muy fuerte y físicamente no estoy mal, pero la situación lo aconseja por el bien de la Iglesia”, ha explicado.

Durante su intervención, ha recordado que tiene “70 marzos” y ha apuntado que en los últimos seis años se ha sometido a varias operaciones, entre ellas una de corazón por la que lleva dos "by pass" en las arterias, además de una "seria" intervención de próstata en 2012, que descartó la existencia de cáncer. También le hicieron otra intervención del menisco de la rodilla izquierda en el último año.

Ureña se ha despedido emocionado, en la Casa de la Iglesia de Zaragoza, de sus feligreses y de los zaragozanos. “Mientras tanto estaré viviendo con vosotros en la capital aragonesa en el Palacio Arzobispal porque alguien tiene que cuidarlo por la noche”.

El Colegio de Consultores elegirá administrador diocesano este jueves

Los doce presbíteros del Colegio de Consultores elegirán mañana, a las 17.00 horas, al administrador diocesano para que administre el Arzobispado de Zaragoza hasta que la Santa Sede nombre un nuevo obispo. Entre los nombres que suenan como candidatos, en palabras de Ureña, está el obispo de Logroño.

Ureña ha hecho balance de su gestión al frente de la iglesia y asegura que se va con la espina clavada de no haber podido devolver los Bienes de Aragón: “Pienso que hay que seguir teniendo paciencia y seguir pidiéndolos porque la suerte está echada y eso tiene que volver porque son nuestros, es decir, son de Aragón”, ha sostenido.

Monseñor Ureña ha explicado que Su Santidad el Papa Francisco ya ha aceptado su renuncia como pastor del gobierno de la Archidiócesis de Zaragoza. Ureña ha agradecido al obispo de Roma su solicitud paternal sobre su persona y sobre toda la iglesia diocesana de Zaragoza.

Además, ha dado las gracias a todos los fieles de la diócesis de Zaragoza por su afecto y cariño durante estos años y ha encomendado “su presente y su futuro a la Virgen del Pilar”.

Manuel Ureña nació el 4 de marzo de 1945 en Albaida (Valencia). El 2 de abril de 2005, Juan Pablo II firmaba su último nombramiento episcopal antes de fallecer y designaba, de esta manera, a Ureña como arzobispo metropolitano de Zaragoza. También es gran canciller de la Universidad San Jorge de Zaragoza y el 13 de junio de 2011 fue investido doctor honoris causa por la Universidad Católica San Antonio de Murcia.

En la Conferencia Episcopal Española es miembro de la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis y de la Comisión Permanente en representación de la provincia eclesiástica de Zaragoza. Entre las distinciones recibidas destacan: Hijo predilecto de Albaida, medalla de oro de la ciudad de Murcia, defensor de Zaragoza 2008, premio IACOM (Instituto Aragonés de Comunicación), premio Fundación Carlos Sanz 2010 y caballero de honor de Ntra. Sra. del Pilar.