Aguilar del Alfambra vuelve a convertirse en el epicentro literario de la provincia de Teruel

Este sábado, Aguilar del Alfambra vuelve a convertirse en el epicentro literario de la provincia de Teruel. Una propuesta cultural arraigada que, como en ediciones anteriores, va a acercar hasta esta localidad a destacados exponentes de la literatura nacional, como el catedrático Vicente Pinilla o las escritoras Laura Serrano y Lara Moreno.

Teruel.- Tras el éxito de las tres ediciones anteriores, en las que las que se puso el foco en la narrativa, la poesía en lenguas minoritarias y el espíritu, este próximo sábado tendrá lugar la cuarta parapetados en una pregunta inicial: “¿en qué parte del mundo está el mundo rural?” La despoblación es hoy un asunto de gran actualidad y la cita cultural de Aguilar del Alfambra va a dedicarse a ello desde la particular visión de la literatura.

Tres personas de reconocido prestigio literario y académico: Vicente Pinilla (Zaragoza, 1959), catedrático de Economía de la Universidad de Zaragoza; y las escritoras Laura Serrano (Borja, 1987) y Lara Moreno (Sevilla, 1978), ofrecerán su mirada sobre la despoblación, que no soledad, sin otra pretensión que ensanchar los análisis y sumarse a una grata conversación con todos los participantes.

El debate, como no podía ser de otra manera, discurrirá por donde el flujo de la conversación literaria nos lleve. Pero se pretende omitir el tradicional pesimismo que asola a las provincias que actualmente viven en primera persona el problema de la despoblación y hacer hincapié en un posibilismo pedagógico, en otra manera de pensar, y por ende habitar, las palabras.

Tal y como ha subrayado el director de la asociación cultural “Aguilar Literaria”, Daniel Izquierdo, son tres los principales objetivos que pretende obtener esta nueva edición de las Jornadas Literarias: “conceptualizar lo rural desde el prisma económico, social, empresarial, testimonial, literario, turístico y laboral; además de ofrecer un punto de encuentro en el calendario, alejado de las fechas veraniegas más tradicionales, para la conversación, así como dinamizar la cultura desde la periferia, fuera de los núcleos habituales”.

Éxito de asistentes

La primera edición de esta jornada literaria reunió a 27 asistentes mientras que en la segunda la cifra ascendió hasta los 52. En la última edición fueron 48, todo un "milagro" aseguran desde la organización, para un municipio en el que apenas viven una quincena de personas durante el invierno.