ARRESTADO EN LA ESTACIÓN DELICIAS

Detenido Benito Ortiz Perea, el preso fugado de la cárcel de Zuera

La Policía Nacional ha detenido a Benito Ortiz Perea, el preso que se fugó de la cárcel de Zuera la madrugada del 29 de agosto cuando regresaba de una revisión médica del Hospital Miguel Servet. Al parecer, según fuentes oficiales, el preso ha sido localizado en la Estación Delicias cuando intentaba coger un autobús con destino a Valencia.

Zaragoza.- La Policía Nacional ha detenido este miércoles a Benito Ortiz Perea, el preso de la cárcel de Zuera de 61 años que logró fugarse de la prisión la madrugada del 29 de agosto. Según fuentes oficiales, Ortiz ha sido localizado esta tarde en la Estación de Delicias de Zaragoza cuando, al parecer, intentaba coger un autobús con destino a Valencia.

La fuga se produjo cuando el interno regresaba en ambulancia de una salida al Hospital Miguel Servet de Zaragoza. Cuando la ambulancia se detuvo en la entrada del Centro Penitenciario, en el trámite de acceso, en el preciso instante en el que se le retira la escolta de Guardia Civil, el interno se quitó los grilletes y salió corriendo del vehículo.

Durante este mes en el que ha permanecido escondido, la Guardia Civil había establecido un dispositivo de búsqueda en el que estaban participando diferentes unidades del cuerpo. Además, Instituciones Penitenciarias y la Guardia Civil estaban investigando las circunstancias en las que se produjo la fuga. En el transcurso de las investigaciones, la Guardia Civil manejaba la hipótesis de que el preso hubiera recibido ayuda de algún conocido para huir.

Atraco y secuestro

El delito por el que cumplía condena Benito Ortíz, el atraco a la armería, quedó, el pasado 24 de noviembre, visto para sentencia. En sus conclusiones, la Fiscalía y la acusación particular se reafirmaron en su petición de penas de 29 y 32 años de prisión para los acusados, los hermanos Ortiz por los delitos de robo con violencia y uso de armas, detención ilegal, tenencia ilícita de armas de guerra, tentativa de robo con violencia en local abierto y uso de armas y tentativa de asesinato. La defensa solicitó la absolución y, en todo caso, penas menores por robo y lesiones. Los Ortiz insistieron en su alegato final en que eran inocentes y que ni siquiera se encontraban en Huesca el día de los hechos.

La Fiscalía, a cuyas conclusiones se sumaron los representantes de la mujer zaragozana que fue secuestrada por los presuntos autores, del dueño del establecimiento y de la propia armería, reclamó para cada uno cinco años de cárcel por robo con violencia y uso de armas, seis años por detención ilegal, tres por tenencia ilícita de armas de guerra, tres años, cinco meses y 29 días por tentativa de robo con violencia en local abierto y uso de armas y 12 años por tentativa de asesinato, que en el caso de Benito O. P. son 14 años, 11 meses y 29 días puesto que, según las partes, hubo un quebrantamiento de condena al cometer el delito al no haberse presentado después de gozar de un permiso penitenciario. Asimismo, la suma de las compensaciones económicas que se reclamaron superan los 85.000 euros.

La Fiscalía y las acusaciones consideraron probados los hechos y la participación de los hermanos Ortiz ante la "catarata de evidencias" que les incriminaban por medio del reconocimiento de las dos víctimas y de testigos oculares y el hallazgo de restos genéticos que les relacionarían tanto con el secuestro y el robo como con el asalto a la armería.