Zaragoza.- Con motivo del Día Internacional del Niño con Cáncer, conmemorado en todo el mundo este viernes, 15 de febrero, la Asociación de Padres de Niños con Cáncer de Aragón (Aspanoa) reclama que estos pacientes tengan la opción de acogerse a un seguimiento médico continuo para prevenir el desarrollo de secuelas. Se calcula que el 70% de los supervivientes del cáncer infantil experimentarán al menos un efecto tardío debido a la propia enfermedad o a los agresivos tratamientos que recibieron para combatirla.
Aunque solo el 30% de estas secuelas serán graves, como el posible desarrollo de un segundo tumor, la creación de un protocolo de seguimiento específico para ellos es fundamental para prevenir o diagnosticar de forma precoz estos efectos tardíos. “Cuando los niños crecen y pasan a la edad adulta, una parte muy importante de su historial clínico se pierde en el sistema sanitario, es decir, no pasa completo del pediatra al médico de cabecera. Un protocolo específico para estos pacientes sería esencial para evitarlo”, explica Miguel Casaus, presidente de Aspanoa. Según la Federación Española de Padres de Niños con Cáncer, a la que Aspanoa pertenece, las secuelas más habituales afectan al sistema nervioso (39%), endocrino (32%), los ojos y los oídos (22%) y reproductivo-urinario (17%).
Actividades para el día internacional
Para este viernes 15, se han programado distintas actividades. Entre ellas, 13 colegios aragoneses formarán lazos dorados -símbolo internacional contra el cáncer infantil- en el patio de sus colegios. También llevarán las caras pintadas con rayas de este color. En total, participan casi 5.500 alumnos. También se ha organizado un Flashmob jotero.
Cientos de joteros bailarán la jota de Antillón en la plaza del Pilar, a las 19.00 horas, en apoyo a los niños con cáncer de Aragón. Este año, por primera vez, este flashmob se desarrollará simultáneamente en Huesca y Teruel. Finalmente, el sábado 16 tendrá lugar gala anual de Aspanoa, con la lectura del manifiesto del Día Internacional (a cargo de la consejera de Investigación, Pilar Alegría), además de espectáculos de magia, o canciones bailadas por niños de Aspanoa.
Falta de derivación en adolescentes con cáncer
Aspanoa quiere aprovechar este Día Internacional para expresar su malestar por la falta de derivación de adolescentes con cáncer a Oncopediatría. El Gobierno de Aragón aprobó en el verano de 2017 que estos menores de entre 15 y 18 años fueran atendidos en Oncopediatría en lugar de en las unidades de adultos. Pero, en este año y medio, tan solo han sido derivados dos casos, cuando se calcula que, en esta franja de edad, se registran entre 8 y 10 nuevos diagnósticos cada año en Aragón.
Aunque es cierto que el Departamento de Sanidad está tomando nuevas medidas para que esta orden sea efectiva, como la reciente creación del Comité Autonómico de Coordinación del Cáncer Pediátrico, Aspanoa entiende que se podría hacer mucho más, por ejemplo, reforzar los protocolos médicos y aumentar la difusión de la orden en las unidades de adultos.
Derivar a los adolescentes a Oncopediatría es una recomendación que desde hace años hace el Ministerio de Sanidad y las sociedades médicas y científicas. Y se fundamenta en que las causas y el tratamiento del cáncer adolescente son más similares al cáncer infantil que al de adultos. También estos menores tendrían más posibilidades de participar en ensayos clínicos y, por supuesto, se entiende que se encontrarían más cómodos rodeados de pacientes más cercanos a su edad que con personas de avanzada edad.
Incidencia del cáncer infantil en Aragón
Aspanoa atendió el año pasado a 196 niños y adolescentes con cáncer en las distintas fases de la enfermedad, de los que 36 fueron nuevos diagnosticados. De estos 196 niños afectados,134 eran residentes en la provincia de Zaragoza, 25 en la Huesca, 12 en la Teruel y 25 de La Rioja (esta Comunidad carece de unidad de Oncopediatría y gran parte de sus niños afectados son derivados a Zaragoza).
Además, puso en marcha las dos primeras investigaciones contra el cáncer infantil de la historia de Aragón. Con una inversión de 260.000 euros, ambas se desarrollan en el Instituto de Investigaciones Sanitarias de Aragón (IIS Aragón), lideradas respectivamente por los científicos Julián Pardo y Alberto J. Schuhmacher.
