EN EL MARCO DE LA "OPERACIÓN MARKHOR"

Detenidas ocho personas que explotaban a paquistaníes en fruterías

Agentes de la Policía Nacional han desarticulado en Zaragoza una organización criminal que favorecía la inmigración ilegal con fines de explotación laboral, cometidos por tres empresas de paquistaníes que se dedicaban a la venta de frutas al por menor. La operación, denominada "Markhor", se ha saldado con ocho detenidos.

Las actuaciones policiales comenzaron en el mes de mayo de 2018 cuando, a raíz de varias denuncias de otros fruteros, se detectó que en una frutería regentada por paquistaníes en la capital aragonesa se estaba explotando a un extranjero de su misma nacionalidad sin permiso de residencia o trabajo.

Por estos hechos, en una primera fase, fueron detenidos dos ciudadanos paquistaníes que fueron multados por la Inspección de Trabajo y Seguridad Social con sanciones de más de 10.000 euros.

En una segunda fase, que se desarrolló desde el pasado mes de enero, los investigadores detectaron a varias personas que trabajaban de forma irregular de madrugada en la carga y descarga de camiones de frutas en Mercazaragoza.

Así, estas gestiones condujeron a la localización de nueve fruterías, todas ellas pertenecientes a extranjeros paquistaníes, en las que se estaba empleando mano de obra irregular proveniente de su país.

Estos establecimientos fueron sometidos a diferentes vigilancias, lo que permitió detectar a cuatro trabajadores explotados sin contrato de trabajo ni permiso de residencia. Además, se pudo constatar que algunos de ellos habían sido traídos desde su país de origen engañados con la promesa de “papeles” y trabajo legal en España.

Para ello, fueron captados en sus países de origen y trasladados por fronteras terrestres no habilitadas con el fin de eludir controles, a pie desde Pakistán a Irán, Turquía, Grecia, Albania, Montenegro, Bosnia, Croacia, Eslovenia e Italia, y de allí hasta España. Por todo este trayecto, les cobraron la cantidad de 8.000 euros.

Una vez en España, fueron conducidos por miembros de la organización, encargados de explotarles, hasta Zaragoza, donde eran empadronados y alojados en dos pisos sobre habitados de la misma organización, donde incluso debían compartir un mismo camastro.

Para lograr sus objetivos, no dudaban en agredir, amenazar y coaccionar a sus compatriotas, que se encontraban en una clara situación de vulnerabilidad. En Zaragoza, eran obligados a trabajar en sus fruterías, sin sueldo ni contrato, sin días de descanso ni vacaciones, en jornadas diarias que van desde las 4.20 horas de la madrugada hasta las 21.00 horas, y recibiendo solamente una comida diaria. Se les trasladaba del piso a Mercazaragoza, de allí a las fruterías, y al acabar, otra vez al piso de la organización. Todos ellos estaban permanentemente controlados para evitar denuncias.

Con estas prácticas, los empresarios lograban un margen mayor de ganancias en la venta de productos en sus negocios, ya que se ahorran de modo ilegítimo costes en personal y seguridad social, con lo que pueden ofrecer precios más bajos, haciendo una competencia desleal a otras fruterías que sí respetan los derechos de sus trabajadores y estaban al día en los pagos de las cuotas e la Seguridad Social.

Sin embargo, las actuaciones culminaron este mes de abril con nueve inspecciones en estas fruterías, en estrecha colaboración con la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Zaragoza, quedando liberadas cuatro víctimas de estos hechos y deteniendo a cuatro de sus responsables, acusados de los delitos de trata de seres humanos con fines de explotación laboral y otros delitos conexos, e imponiendo la IPTS sanciones por más de 40.000 euros en estas fruterías a raíz de las inspecciones practicadas conjuntamente por ambos organismos.

El principal investigado, que se hallaba en Pakistán durante el desarrollo del operativo policial, fue detenido el pasado martes recién regresado de su país, elevando el número de detenidos hasta ocho, de los que seis están investigados por trata de seres humanos y/o delitos contra los derechos de los trabajadores, y dos por infracción a la Ley de Extranjería. Los detenidos, de los que tres son de la misma familia y ya habían regentado negocios de este tipo en la localidad alicantina de Benidorm, fueron puestos a disposición judicial.

Este operativo policial ha sido llevado a cabo por funcionarios del grupo primero de la Unidad Contra Redes de Inmigración y Falsedades Documentales (U.C.R.I.F.) de Zaragoza, de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de Aragón, habiendo colaborado en la misma la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Zaragoza.

El trabajo desarrollado por la unidad policial se encuadra dentro del “Convenio de Colaboración entre el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y el Ministerio del Interior sobre Coordinación entre la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en materia de Lucha Contra el Empleo Irregular y el Fraude a la Seguridad Social”, firmado el 30 de abril de 2013.

Las investigaciones continúan abiertas, analizándose la documentación, por lo que no se descartan futuras detenciones.