Zaragoza.- La corporación municipal, prácticamente en pleno y encabezada por el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, aguardaba a las puertas de la catedral de La Seo la llegada del nuevo arzobispo de Zaragoza. Junto a ellos, cientos de fieles esperaban ansiosos poder ver de cerca al que, desde este domingo, se ha convertido en mediador “entre Dios y los hombres” en la capital aragonesa.
El valenciano Manuel Ureña, elegido por el difunto Papa Juan Pablo II como nuevo arzobispo de Zaragoza en marzo, llegaba a la plaza de La Seo pasadas las 16.30 horas. Allí, entre aplausos de los zaragozanos y flashes de los medios de comunicación, el nuevo prelado era recibido por su antecesor, Elías Yanes, y el nuncio apostólico en España, Manuel Monteiro.
La emoción no ha tardado mucho en hacer aparición en el ánimo del que, en breves instantes, iba a tomar posesión de su nuevo cargo. Con los ojos bañados en lágrimas, y saludando a todos los que se habían acercado hasta la catedral de Zaragoza para darle la bienvenida, Ureña ha encabezado una procesión hasta el altar mayor del templo, escenario en el que ha tomado juramento sobre los evangelios y recibido la mitra que le acredita como máximo responsable de la Iglesia en la diócesis de Zaragoza. No obstante, la comitiva ha realizado una parada en la capilla de Santa Elena para orar y dar gracias previas por la nueva etapa pastoral que se inició este domingo.
Belloch, mediante la fórmula tradicional “en nombre de la ciudad venimos a acompañar a vuestra excelencia al hacer vuestra entrada solemne en esta archidiócesis”, ha dado la bienvenida a la ciudad a Ureña. Posteriormente, éste ha prometido “guardar la inmunidad de la Iglesia cesaraugustana y mantener y defender los privilegios, la libertad, los estatutos, la bula de unión, los acuerdos y las loables costumbres de dicha iglesia, siempre que no sean contrarios a las disposiciones de los sagrados concilios y del derecho común”.
Posteriormente, la comitiva, formada por los respectivos presidente y secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Antonio María Rouco Varela y Juan Antonio Martínez, así como diferentes arzobispos, obispos, obispos auxiliares, cardenales y obispos eméritos y abades, ha marchado en procesión hasta la basílica del Pilar. Este templo ha sido el elegido para celebrar la misa de inicio del ministerio pastoral de Ureña y allí estaban, entre otros, el subdelegado del Gobierno en Aragón, Juan José Rubio; el presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias; el presidente de las Cortes de Aragón, Francisco Pina; el Justicia de Aragón, Fernando García Vicente; el presidente de la Diputación Provincial de Zaragoza, Javier Lambán; el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón, Fernando Zubiri; el rector de la Universidad de Zaragoza, Felipe Pétriz, y el general comandante de Zaragoza, Fernando Torres.
El gran ausente de la tarde ha sido el presidente de la Región de Murcia, José Luis Valcárcel, quien no ha podido asistir al nombramiento del que, anteriormente, ostentó el cargo de obispo residencial de la diócesis de Cartagena desde el 1 de julio de 1998, a pesar de haber confirmado su presencia en este acto. No obstante, han sido muchas las autoridades políticas de Murcia y la Comunidad Valenciana las que sí han hecho acto de presencia en la toma de posesión de Ureña.
Tras visitar a la Virgen y revestirse en la sacristía mayor, la comitiva se ha dispuesto a ocupar sus respectivos lugares en el altar mayor mientras los infanticos entonaban el “Bendita y alabada”. Una vez finalizado el canto de entrada, ha dado comienzo la ceremonia en sí. No obstante, el arzobispo saliente, Elías Yanes, ha saludado al nuevo “pastor” indicando que la comunidad le recibe “con espíritu de fe y de amor, como enviado del Señor”.
Por su parte, Monteiro, ha declarado que “la solicitud del Papa por esta histórica sede de España se hace patente una vez más con el nombramiento de su nuevo arzobispo, de todos bien conocido por sus virtudes, cualidades y probadas dotes en el ministerio sacerdotal en Valencia y en el munus apostólico en las diócesis de Ibiza, Alcalá de Henares y Cartagena”.
Durante su homilía, Ureña ha instado a los jóvenes a "buscar en su interior la llamada de Dios y de la fe". Aludiendo a la histórica devoción de los zaragozanos por la Virgen del Pilar, el nuevo arzobispo de Zaragoza ha manifestado que su misión en el nuevo cargo adoptado hoy será, fundamentalmente, fomentar nuevas vocaciones entre los fieles zaragozanos.
