Queda inaugurada la cuenta atrás para la Expo

El Centro de Visitantes de la Expo que se ha inaugurado este miércoles ha marcado el inicio de la cuenta atrás para el comienzo de la Expo. El denominado primer pabellón de la Expo mostrará a los vecinos y turistas los encantos de lo que será la Exposición Internacional de Zaragoza.
Zaragoza.- Dos gotas de agua con voz muy aguda y sonora gritan: “Quedan dos para el ocho”. Esas mismas dos pequeñas y revoltosas mascotas reciben a todo el que llega al Centro de Visitantes para que todo tenga un toque ameno y festivo. Unas gotas que representan la cifra del día 14 -dos- y también la sostenibilidad de la que hace gala la Expo de Zaragoza. Mientras tanto, Fluvi, la verdadera mascota, se mantiene en un segundo plano, con sus saltones ojos melancólicos por el protagonismo dado a los nuevos. Y es que este miércoles se ha inaugurado el Centro de Visitantes de la Expo, lo que puede ser denominado el primer pabellón de la muestra zaragozana y que es la primera gran obra, que pretende ser ejemplo de lo que será dentro de dos años la Expo de Zaragoza.

En la inauguración han estado, como no podía ser menos, todos los máximos representantes de las autoridades civiles y militares de la Comunidad, desde el presidente aragonés, Marcelino Iglesias, hasta el presidente del Colegio de Notarios de Aragón, pasando, por supuesto, por todos y cada uno de los grupos políticos del Ayuntamiento y por los representantes de la sociedad estatal Expoagua.

Invitados han estado también diversos colectivos sociales, como Disminuidos Físicos de Aragón, además de 22 periodistas invitados por la Expo y que representan a diferentes medios de comunicación de las 17 comunidades autónomas. Todos ellos han asistido, primero, a un espectáculo de claqué representado por el equipo del coreógrafo Guillem Alonso y, luego, a la izada de bandera de los 31 países que han confirmado su presencia en Zaragoza. Naciones como Kazajstán, Yemen o Bélgica mostraran sus encantos en los pabellones preparados por la sociedad Expoagua y su bandera ya ondea en el cielo de Ranillas.

Tras esto, la inauguración del nuevo centro. Como en todo el acto, el corte de la cinta ha estado presidido por la imaginación. La tradicional cinta ha sido sustituida por dos telas de distintos tonos de azul, que estaban anudadas y han sido desatadas por Marcelino Iglesias, Juan Alberto Belloch y Roque Gistau, que tras este intenso momento han decidido paliar el calor poniéndose esos trozos de tela a modo de foulard antes de entrar en el nuevo centro.

Una vez allí, miradas de complicidad y de ilusión entre todos los asistentes. Mientras Roque Gistau se entretenía en enseñar a los representantes de los medios de comunicación toda la información presente en las pantallas táctiles de la primera sala, el resto de políticos asisten atentos a un vídeo que muestra las excelencias de la Expo de Zaragoza, hasta que Fluvi decide recuperar su protagonismo y despide el documental.

Tras un leve recorrido por la sala de prensa, con capacidad para 80 personas, todos los asistentes son llevados hacia el área de las sensaciones. Frío, humedad y, por fin, tecnología. El visitante se acerca a las pantallas y los chorros le responden, a su vez, con movimiento, como si fuera una puerta mecánica. Otro vídeo para los políticos y otra vez Roque Gistau, que se escabulle de nuevo para hablar con los más cercanos. Y es que al señor Gistau no le gustan mucho las oficialidades. Luego, mientras el resto de grupos realizan la visita, periodo de charlas, de ágapes, de conversaciones entre viejos amigos… y las gotas siguen recordando. “Quedan dos para el ocho”. Ha comenzado la cuenta atrás.