Zaragoza.-. El presidente de la Federación Aragonesa de Caza, Fernando Tello, ha afirmado que la población excesiva de sarrios en el pirineo aragonés es lo que ha generado que el brote de queraconjuntivitis aparecido desde hace dos temporadas se haya propagado con tanta intensidad. A juicio del presidente de los cazadores, la Naturaleza tiene sus propias armas –en este caso, el virus- para mantener todas las especies en sus condiciones óptimas.
“Si no se hubiera elevado la densidad de la especie a los extremos a los que se ha llegado, seguramente no habría aparecido la queraconjuntivitis, hubiera sido menos virulenta o hubiera tenido mucha menos incidencia de contagio”. Así de rotundo se ha manifestado Tello, quien considera el brote como una herramienta natural de reajuste. “La Naturaleza admite unas poblaciones óptimas y cuando se pasan de ahí, pues pasa como en la Biblia, que te mandan una plaga”, ha añadido.
De hecho, Tello opina que “no es bueno una ultraprotección” que aumente de forma anómala los individuos de una especie, “porque viene la Naturaleza y lo arregla rápidamente”.
A favor de recuperar la especie
En cuanto a qué medidas llevar a cabo para paliar los efectos del brote, el presidente de los cazadores aragoneses afirma que desde la Federación están a favor de preservar las poblaciones de animales. Así, y ante la posibilidad de que la Junta Consultiva decida en septiembre reducir el coto de caza de sarrios, Tello añade que “ser cazador no implica no ser sensato”, por lo que dice que si esta medida es la adecuada para garantizar la supervivencia de la especie, los cazadores la apoyarán.
“Estamos a favor de intentar recuperar la población, entonces si cazando menos se recupera, estupendo. Si descubrimos que es mejor el sistema de los austriacos, que es cazar más para que haya menos densidad y sea más difícil el contagio, pues estaremos a favor del sistema que se descubra que es mejor”, ha dicho Tello.
Asimismo, desde la Federación Aragonesa de Caza dicen estar pendientes de los censos de sarrios y del número total de afectados, puesto que “lo demás, es hacer hipótesis”. En este sentido, Tello cree que en algunas zonas la bajada de esta especie ha sido “imperceptible”. “Se han hecho varios censos y han salido los mismos animales que los otros años. En Villamala es donde ha habido mayor incidencia del brote. Ahora en Los Valles habrá que ver cuál es resultado y también en Benasque, aunque yo no he tenido noticia de que haya habido una hecatombe”, añade.
