Zaragoza.- La contaminación y las escasas lluvias de este verano han provocado en el río Ebro “síntomas de enfermedad”. Así lo han denunciado los expertos de la Fundación Nueva Cultura del Agua (FNCA), que han destacado que las algas que han aparecido en el Puente de Piedra o la necesidad de agua en el Soto de Cantalobos son algunos de los ejemplos de la situación “preocupante” en la que se encuentra el río Ebro.
El profesor de la Universidad de Zaragoza y ex presidente de la fundación, Pedro Arrojo, ha remarcado que “hay que identificar los problemas y tener voluntad para resolverlos. Hay que cambiar las actitudes y los compromisos y mirar al futuro de forma más seria y rigurosa”.
Por su parte, el catedrático de la UZ y miembro de FNCA, Javier Martínez, ha señalado que “la presencia de algas en el río, el aspecto desagradable que está teniendo y la sequía en el Soto de Cantalobos son fenómenos recurrentes que han ocurrido en otras ocasiones”.
Además, Leandro del Moral, ex presidente de FNCA y catedrático de la Universidad de Sevilla ha añadido que “la situación del agua y la afección a los sotos hace que el panorama sea preocupante”.
Además, los expertos han apuntado que entre los problemas que están creando esta situación en el río Ebro se encuentran los dragados y la contaminación procedente de los regadíos.
Entre las soluciones, desde la Fundación Nueva Cultura del Agua han aseverado que hay que fomentar las buenas prácticas agrarias e intentar reconvertir el regadío para aumentar la competitividad. La Fundación está preparando unas jornadas para los próximos meses, en las que a través de sus expertos, analizarán el estado del río Ebro a su paso por Zaragoza.
