Pernoctaciones accesibles

Zaragoza.- Ser discapacitado en un mundo hecho para capacitados es un problema. El inconveniente no está sólo en las barreras arquitectónicas a las que, día a día, se tienen que enfrentar más de 500 millones de personas en todo el mundo. Sino que, además, tienen que resignarse en muchos casos a no poder disfrutar, por ejemplo, del ocio al que, teóricamente, tiene derecho todo ser humano.

Conscientes de este problema al que tienen que hacer frente millones de personas, la cadena hotelera Confortel, perteneciente a la Corporación Empresarial de la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), ha mostrado siempre su compromiso con este colectivo. En la actualidad gestiona 18 hoteles por toda España, uno de ellos en Zaragoza, el Confortel Romareda.

El turismo accesible real para todos es su principal objetivo. Ofrecer una atención y servicio personalizado aunado a un trabajo duro por consolidarse como compañía altamente competitiva en la gama de los hoteles cuatro estrellas con unas instalaciones modernizadas forma parte de su día a día. La directora de Confortel Romareda, Beatriz Miguel Díez, asegura que éste es uno de los valores fundamentales de la empresa. “Intentamos que todos los que nos visiten, discapacitados o no, se sientan como en su propia casa, tanto por las comodidades del hotel como por el trato que reciben por parte de nuestros empleados”, señala.

Al hablar de discapacidad, la sociedad tiende a pensar en la física y de movilidad reducida. Se habla mucho de eliminar las barreras arquitectónicas, pero en Confortel, tienen en cuenta todo tipo de discapacidad, desde la física hasta la auditiva, pasando por la visual e incluso la alimenticia. Algo que en el hotel Romareda han logrado tras las últimas reformas acometidas en sus instalaciones. “Por tema de discapacidad física acabamos de instalar en el hotel dos plataformas elevadoras. Hemos cambiado también la cabina de uno de los ascensores para adaptarla y cumplir la normativa de más de 80 centímetros de paso dentro del mismo. Para discapacidad auditiva tenemos, por ejemplo, un bucle magnético, un despertador vibrador y una serie de ayudas técnicas para este tipo de personas. Además, el hotel forma parte de la Asociación de Celiacos de Aragón, por lo que tenemos todos los menús adaptados”, explica Beatriz Miguel.

Beatriz Miguel es la directora de Confortel Romareda

Todas estas instalaciones, junto a la atención al cliente, han hecho a Confortel Romareda merecedor del certificado AENOR de Accesibilidad Universal. Un reconocimiento que garantiza a cualquier persona, con o sin discapacidad, las mismas posibilidades de acceso y disfrute de los servicios prestados por el establecimiento.

“Lo que se trata es de que sean hoteles accesibles para todos, lo que hemos hecho en Romareda, aparte de la reforma, ha sido integrar este proceso de la certificación eliminando todas las barreras arquitectónicas que había en el hotel. Con lo cual, un cliente que entra en el hotel, tú no tendrías que darte cuenta que ese cliente tiene una discapacidad. Su estancia en el hotel o todos los procesos que tenga que hacer internamente no necesitan ayuda ni se ven con ningún tipo de limitación”, aclara la directora.

Trato personalizado

La cercanía con el cliente y el cuidado en su atención es uno de los ejes fundamentales de la política de la cadena Confortel. “El trato con el cliente nos ha ayudado un montón. El poder ver a una persona que tiene una dificultad enorme y la capacidad de autosuperación que tiene te toca la parte más sensible y humana”, explica Beatriz Miguel.

Hace un año, Confortel Romareda acogió a un matrimonio de Belver de Cina (Huesca). El hombre tuvo un accidente de tráfico en el que perdió las dos piernas. Estuvieron alojados nueves meses mientras él era atendido en el Hospital Miguel Servet. El hombre entró en silla de ruedas y salió en octubre andando con las prótesis. “Vivimos todo el proceso de la evolución que ha tenido el hombre. Fue una experiencia ejemplar para todos y muy emotiva ya que el hombre llegó pensando que no iba a salvar su vida y se marchó valiéndose por sí mismo. Eran ya como de la familia”, indica Beatriz Miguel.

La cadena hotelera Confortel gestiona 18 hoteles por toda España

Historias como ésta acreditan a la cadena hotelera como merecedora del certificado recibido. En el caso de Aragón, el Confrotel Romareda es el único de toda la Comunidad con este reconocimiento. “Todos los hoteles que se construyen nuevos tienen que cumplir una normativa mínima de accesibilidad, un número de habitaciones adaptadas por plazas hoteleras, etc. Lo que está claro es que lo más importante es la atención al cliente discapacitado y nosotros intentamos dar un paso más allá”, comenta Beatriz Miguel.

Pero además del colectivo discapacitado, la cadena Confortel Romareda tiene un mix de clientes que ha ido creciendo en los últimos años, especialmente a raíz de la Expo de 2008, donde Zaragoza se ha convertido en una ciudad de congresos. “Entre semana tenemos muchos clientes de empresa o trabajo, la ubicación del hotel además permite muchas comodidades ya que está cercano al Auditorio, la Universidad y ahora, con el tranvía, llegas al centro en muy poco tiempo”, explica. Además, en fin de semana el turista de ocio tiene mucha acogida en el hotel, especialmente su cercanía con el estadio de La Romareda permite acoger a muchos aficionados al fútbol.

Para Beatriz Miguel, cualquier evento que se celebra en la ciudad “va a favorecer, no solamente al sector turístico, sino en general a todos los sectores. Cuanta más oferta tenga una ciudad, turística, de eventos, congresos, etc., siempre va a generar un mayor desplazamiento de visitantes nacionales e internacionales. El aeropuerto, las infraestructuras y el AVE siempre beneficia a toda la ciudad y a nuestro sector”.

Confortel

El turismo accesible con el que los hoteles Confortel se compromete permite hacer realidad una oferta al máximo número de personas, al margen de su edad, discapacidad o cualquier otra circunstancia personal que afecte a su capacidad de comunicación o de movilidad.

Es por ello, que los certificados recibidos demuestran que su compromiso con las personas con discapacidad es firme y duradero; al mismo tiempo, confirman su visión de mercado, ampliando su oferta comercial a un importante colectivo de la sociedad.